Dios
es eterno.
Toda criatura tiene un día de inicio
pero Dios está desde antes de la eternidad.
Creerlo y experimentarlo es nuestra fe.
Aunque en el culto su carne está, en la iglesia sin fe,
no es la Persona viva sino muerta.
El encuentro con el Señor
es posible cuando se experimenta en la obra de Dios.
Su vida se transforma por Dios, teniendo ese encuentro.
Así que se necesita la nueva fe que experimenta,
anhelando el Reino del Cielo y viviendo guiado por Dios.
Recibe el Espíritu Santo por regalo cuando vive con esa fe.
Y los dones del Espíritu Santo se manifiestan en los miembros del cuerpo.
De esta manera,
nos da el Espíritu Santo para ayudar nuestra fe
y los dones son señales que testifican la permanencia del Espíritu Santo.
El encuentro entre Dios y nosotros
se da en el lugar llamado nuestra carne.
Toda carne con el corazón arrepentido puede tener el encuentro con el Señor.
Tan solo por el poder del Espíritu Santo se puede conocer a Dios.
◎ Si no se conoce a Dios por el Espíritu Santo,
el conocimiento se convierte en una especie de filosofía,
lo cual es idolatría.
◎ El evangelio celestial que predicamos
debe ser por el conocimiento del verbo que era con Dios.
Es la vida eterna.
◎ Nosotros hemos de experimentar en Dios.
Conocer a Dios es el verdadero culto.
Es la fe verdadera, la verdadera vida.
※ Cuando conocemos a Dios estando conmovidos por el Espíritu Santo
podemos experimentar en Dios en dondequiera que estemos.