Dios
es el Espíritu Santo.
Y
las tres personas (Padre, Hijo y Espíritu Santo) son uno.
Recibir el Espíritu Santo
no es recibir una de las tres personas que Dios tiene,
sino es recibir a Dios mismo.
Por eso,
sin estar conmovidos por el Espíritu Santo, no podemos experimentar a Dios.
El Espíritu Santo
nos hace conocer al Dios Padre eterno que está desde antes de todas las cosas,
y al Hijo de Dios quien es ‘el fin de Dios’, el Omega.
El inicio de Dios es el que comenzó.
El fin de Dios es el que juzga.
Dios es el Santo Espíritu, nuestro Padre.
Así que,
el que adora a Dios el Padre debe ser espiritual.
Dios que es Espíritu, nos hizo ‘espíritu viviente’.
Nuestra fe comienza por conocer esto.
Tan solo si rinde el culto como ´un espíritu viviente´
puede experimentar a Dios.
◎ Tan solo
el espíritu viviente puede dar un culto verdadero y
puede amar a Dios por el culto verdadero.
◎ Cada vez amemos más a Dios.
Dios nos ayuda.
Dios es nuestro Padre.
◎ Un espíritu viviente no solo cree en Dios,
sino que también lo anhela.
El que tiene la fe con anhelo puede triunfar en su vida de la fe.
※ Es importante ser santos y justos,
pero primero debemos estar llenos del Espíritu Santo.
¡Que mi espíritu esté lleno del Espíritu Santo!